¿Por qué grita la
gente cuando está enojada? – preguntó el maestro.
Porque perdemos la calma, por eso gritamos... -, contestó un
discípulo.
Pero... ¿Por qué
gritar si la otra persona está a tu lado? -, volvió a agregar el maestro. Nadie
contestó esta vez y el maestro entonces dijo:
Cuando dos personas
están enojadas, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir dicha distancia
deben de gritar para escucharse.
Cuanto más enojados estén, más alejados estarán y tendrán
que gritar más para poder escucharse el uno al otro. Sin embargo, cuando dos
personas se enamoran, se hablan suavemente porque sus corazones están muy
cerca. La distancia entre ellos es muy pequeña. Cuando discutas, no dejes que
tu corazón se aleje. No digas palabras que te distancien más, pues llegará
algún día en que la distancia será tanta que no podrás encontrar el camino de
regreso.
Una sabia explicación, no me gustan los gritos y ahora ya se porque gritan los enojados. Abrazos muy cerquita
ResponderEliminarSi Ester, vamos a tenerlo en cuenta para cuando nos de las ganas de gritar, pensar en esa distancia y convertirlo en un susurro. Un abrazo
EliminarMe acabas de aclarar uno de los mayores misterios de mi vida, por qué la gente gritona es gritona.
ResponderEliminarbesossss
De verdad Alicia, hay gente gritona que aún en silencio siguen gritando, jajaja. Un abrazo
EliminarHola Ana, una sabia reflexión. Cuando gritamos la comunicación no es efectiva, porque el mensaje es difuso, y lo que queremos expresar no se entiende. Pero también es verdad es un gesto muy común y cotidiano que casi todos realizamos llevados por nuestro instinto animal, sin pararnos a reflexionar sobre la necesidad de utilizar otro sistema para corregir una discrepancia. Montar en cólera nunca ha solucionado ningún problema, al contrario, es la gasolina que incrementa el fuego de la ira.
ResponderEliminarUn abrazo de luz!
Muchas gracias Cristina por tus palabras. Cuando gritamos nos ofuscamos y pretendemos poner nuestro criterio y eso no lleva a nada. Un abrazo de luz
EliminarHola Ana.. Precioso, y que gran verdad..
ResponderEliminarUn abrazo..
Pues si Llorenç, si, y así es de sencillo y de verdadero. Un abrazo
Eliminar¡Cuánta razón tenía el maestro! Un abrazo.
ResponderEliminarSi Rita, mucha razón, así que a hablar bajito. Un abrazo
EliminarNo por mucho gritar se tiene más razón, decía mi madre...
ResponderEliminarMagnifica reflexión y una gran verdad.
Un abrazo.
Normalmente es al revés, cuanto más se grita menos razón se tiene. Un abrazo M. Carmen un abrazo
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