Desde un espacio de silencio interno, aprendemos a generar
buenos sentimientos, que serán la base para una autentica generosidad.
Si nos atrevemos a compartir, surgirán posibilidades
inesperadas que nos permitirán sanar, crecer y ganar nuevas amistades. Seremos
conscientes de nuestro potencial interior, que estaba dormido y empezaremos a
conocernos mejor.
Cultivando y nutriendo la paz, el amor, la autenticidad, la
sabiduría y la felicidad, nos daremos cuenta de que éstos son nuestros tesoros
internos más valiosos, y nuestro propósito es compartirlos. Al hacerlo, estos
tesoros no sólo se incrementan en nosotros
y en nuestras amistades, sino que se genera un ambiente transformador
que elimina la negatividad y el pesar. La generosidad nos protege del dolor y
del rencor, ya que los sentimientos positivos que compartimos nos favorecen y
no atraemos aquello que nos afecta, hiere y encierra nuestro corazón.
Ser generosos mantiene despierto nuestro potencial interno
para crear vínculos de amor y amistad. También fortalece nuestra propia
confianza y la de los demás hacia nosotros.
Cuando la seguridad y la estabilidad interior es patente en
nosotros, nos brota una generosidad abundante, cuantiosa…
No nos debemos olvidar, que tenemos que vivir en continua relación con los demás, tampoco de la capacidad que tenemos dentro de nuestro corazón para ser generosos. Creo que la generosidad está muy presente en nuestra sociedad aunque no lo parezca, hay pequeños actos cotidianos que lo demuestran y es muy positivo que la tengamos en cuenta, ya que cultivarla es cosa nuestra y siempre nos reportará grandes beneficios para nuestro espíritu. Un beso.
ResponderEliminarDebemos ser más humanitarios y hechar una mano a los demás siempre que se pueda . Ya es hora de dejar de pensar en uno mismo y empezar a pensar en las necesidades de los demás y en cómo podemos ayudarles, y ya que "en esta vida todo se paga", ayudemos desinteresadamente incluso por nuestro propio bienestar y ese esfuerzo nos será recompensado satisfactoriamente.
ResponderEliminarSaludos.
Luzdemar, Londonnek, la generosidad es un don que tenemos en el corazón y a unos nos cuesta más que a otros el sacarlo, hay veces que somos muy generosos con los nuestros, pero somos incapaces de darle una sonrisa al vecino del 5º. Ser generoso requiere tener un corazón repleto de compasión. Gracias por vuestros comentarios y recibir un abrazo
ResponderEliminarGracias por tu generosidad!!!
ResponderEliminarRecuerdo cuando era niña que nos hablaron sobre la generosas y la sensación de felicidad que producía llevarla a la práctica y sentirla fluir...
ResponderEliminarLo ha descrito con todo detalle tal y como es a mi entender. TE FELICITO.
Un beso grande amia mía.
HOLA ANA CIELO QUE BIENNNN YO VOY A INTENTAR ESTAR EN ESE ESTADO DE RELAJAMIENTO, NO SE SI LO LOGRARÉ PERO AL MENOS LO INTENTARÉ, GRACIAS POR EXPLICAR COMO HACER YOGA SUPONGO QUE LLEVARÁ UN TIEMPO PERO A VER SI LOGRO ESTAR FELIZ BESITOSSSSSS
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