Es muy difícil que todas las personas nos sintamos al cien
por cien satisfechos con todo lo que nos incumbe, trabajo, aspecto físico,
posición…, siempre hay un algo que no nos gusta mucho.
Para sentirnos satisfechos en la vida conviene evitar la
exigencia desmesurada. Valorar lo que tenemos y no pensar en lo que nos falta.
Hay personas que siempre están satisfechas con su vida y
sobre todo con lo que hacen, alaban de una forma desmesurada su trabajo, lo
hacen mejor que nadie y si se dedican a hacer manualidades, éstas les quedan
magníficamente bien.
En cambio hay otras personas que es todo lo contrario, se
sienten insatisfechas porque en cada decisión o proyecto se obsesionan por
obtener el mejor resultado.
En el primer caso, está muy bien que nos sintamos
satisfechos pero siendo humildes, sin altivez ni vanidad, reconocer que los
compañeros también hacen bien su trabajo y que esa manualidad tan maravillosa
hay personas que la hacen maravillosamente bien.
Las personas insatisfechas, tienen que aprender a escuchar a
los demás y creerles cuando les dicen que lo
han hecho bien. La solución al problema es aprender que algo
medianamente bueno, es suficiente. Así poco a poco irán valorándose y
encontrándose satisfechos de su trabajo.
El querer hacer las cosas bien, no es malo, la exigencia en lo que hacemos si, ya que nos provoca frustración y esto solo nos lleva, a tener una autoestima baja, haciendo que nos sintamos mal. El no mirar lo que hacen los demás y valorando lo que hacemos, es el único camino, para estar satisfechos con uno mismo. Un beso.
ResponderEliminarHola Ana, no es fácil sentir en ocasiones esa satisfacción, aunque por otro lado y tal como señalas suele estar al alcance de la mano. Todo sería ser conscientes de la realidad en que vivimos.
ResponderEliminarBuena reflexión.
Un abrazo.
El ser humano es un ser insatisfecho por naturaleza, siempre queremos más...
ResponderEliminarLo importante es hacer lo que puedas. Un beso.
ResponderEliminarNos esforzamos para mejorar, para crecer y para seguir ...
ResponderEliminarEste esfuerzo no es la causa de la insatisfacción , es la lucha para alcanzar el bienestar .
Caundo las cosas se hacen desde la raíz de la humildad , generosidad y amor incondicional , todo fluye. Si por la contra actuamos de mala fe, nos traiciona la avaricia, altanería y el ego se engorda y tarde o temprano nos pasará factura. Un abrazo
Totalmente de acuerdo, en la insatisfacción encuentras caminos duros y muchas veces malos consejeros, quizás no estemos del todo satisfechos pero siempre hay algo que nos hace sentir bien con la vida... besos :*
ResponderEliminarHay que hacer las cosas bien, pero sin agobios, que al final nos exigimos demasiado Luzdemar. Un abrazo
ResponderEliminarErnesto, es bueno sentirnos satisfechos, pero sin engordar el ego. Un abrazo
ResponderEliminarAlicia, es cierto pero si conseguimos mantener la mente serena, la insatisfacción y la satisfacción, desaparecen. Un abrazo
ResponderEliminarSusana, estar conformes con nosotros mismos, es lo mejor. Un abrazo
ResponderEliminarCandela, unas palabras muy ciertas las tuyas, lo has explicado a las mil maravillas, gracias. Un abrazo
ResponderEliminarClaro Patty, todos los días hay pequeñas cosas que nos llenan de satisfacción, y eso es bueno. Un abrazo
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