En eso andamos, por eso es mejor ordenar todo antes de la marcha. Total, se va de vuelta con las manos vacías y el alma llena de experiencia, pero hay que procurar que ella esté también libre de lo del mundo. se hace pasado que pese tanta realidad que no podemos mejorar, aunque lo intentemos en muchos casos. Se intenta disfrutar de la vida, pero no siempre es fácil sentir con plenitud y ser feliz. Sólo son migajas, momentos, ilusiones pasajeras como la mirada de un niño que ve una pompa de jabón hacerse enorme y... ¡a otra cosa mariposa! con esa inocencia y su mundo me quedaría. Esa es la vida auténtica.
Queridos seguidores, les doy las gracias por compartir su tiempo con este blog. Hay personas que brillan con luz propia y vosotros la tenéis. Alumbráis mi existir y el del blog, con vuestros comentarios y visitas. Sois unos encantadores magos que hacéis que mi alma se ilumine de luz y color. A veces es necesario tomar un nuevo rumbo para seguir creciendo.
Una frase con altas dosis de positividad.
ResponderEliminarUn beso.
Cada año que cumplimos es un regalo para un nuevo viaje alrededor del sol. Abrazos
ResponderEliminarQue palabras más ciertas, me encanta tu blog y las frases que cada día nos pones para que reflexionemos. Saludos
ResponderEliminarTodo es un viaje... Besos, feliz año nuevo.
ResponderEliminaradevărate şi frumoase cuvinte !
ResponderEliminarcu drag, îţi doresc weekend cât mai plăcut !
El tiempo en que recorreremos esta existencia nadie lo sabe por lo que es mucho mejor dejarse llevar por ella y disfrutarla al máximo.
ResponderEliminarBesos
que esa belleza siempre convoque la vida...
ResponderEliminarEn eso andamos, por eso es mejor ordenar todo antes de la marcha. Total, se va de vuelta con las manos vacías y el alma llena de experiencia, pero hay que procurar que ella esté también libre de lo del mundo. se hace pasado que pese tanta realidad que no podemos mejorar, aunque lo intentemos en muchos casos. Se intenta disfrutar de la vida, pero no siempre es fácil sentir con plenitud y ser feliz. Sólo son migajas, momentos, ilusiones pasajeras como la mirada de un niño que ve una pompa de jabón hacerse enorme y... ¡a otra cosa mariposa! con esa inocencia y su mundo me quedaría. Esa es la vida auténtica.