Los faros son torres edificadas junto al mar, para ayudar a orientarse a los diversos barcos que surcan la mar, y no pierdan el rumbo, sobre todo cuando la mar se pone brava.
Nosotros también deberíamos tener un faro en nuestra vida, para seguir el rumbo y saber donde queremos ir.
En nuestro faro debemos tener el proyecto bien visible y la ilusión y las ganas de llegar a la meta, para hacerlo realidad.
El faro sirve como recordatorio de un viejo principio para una vida esclarecida: el propósito de la vida es una vida con propósito.
Nuestro faro nos debe guiar, y nosotros tener al faro cómo referencia para guiarnos por la vida.
A lo largo de nuestra vida encontramos faros que tomamos como guía y nos ayudan a seguir determinados caminos.
Otras veces somos nosotros mismos los que servimos de faro a los demás. Siempre la luz nos orienta en nuestra vida.
El proposito de la vida es un vida con proposito. Me encanta esta frase y a veces como me cuesta ver y seguir ese proposito.
ResponderEliminarY sì, q afortunada soy pq tengo tb faros en mi vida... Tu eres un faro en mi vida. Tqm
Hola Ana.Me ha encantado.Y en estos momentos,que mi barco va un poco a
ResponderEliminarla deriva,es lo mas oportuno que he podido leer,parece que lo has
escrito para mi.Seguiré buscando esa luz que me lleve a buen
puerto,esquivando lo mejor que pueda las rocas que me encuentre en el
camino,para que mi barco se dañe lo menos posible.Gracias y un beso.
Hola Ana.Me ha encantado.Y en estos momentos,que mi barco va un poco a
ResponderEliminarla deriva,es lo mas oportuno que he podido leer,parece que lo has
escrito para mi.Seguiré buscando esa luz que me lleve a buen
puerto,esquivando lo mejor que pueda las rocas que me encuentre en el
camino,para que mi barco se dañe lo menos posible.Gracias y un beso.