La Virgen del Pilar es una advocación mariana de la Iglesia
católica, cuya imagen tiene su principal centro de culto en la Basílica del
Pilar de Zaragoza.
El 20 de mayo de 1642 el municipio de Zaragoza proclamó a la
Virgen del Pilar patrona de la ciudad, patronazgo que se extendió a todo el
Reino de Aragón en las Cortes aragonesas de 1678. Acumula otros patronazgos,
como el del Cuerpo de la Guardia Civil (1913), Cuerpo de correos (1916), Cuerpo
de secretarios, interventores y depositarios de administración local (1928),
Sociedad mariológica (1940), patrona de la hispanidad por el papa Pio XII
(1945), Consejo superior de misiones (1948)1 y del Arma Submarina de la Armada
Española (1946).
La leyenda sobre sus orígenes se remonta al año 40, cuando,
de acuerdo con la tradición cristiana, el 2 de enero la Virgen María se
apareció a Santiago el Mayor en Caesaraugusta. María llegó a Zaragoza «en carne
mortal» —antes de su Asunción— y como testimonio de su visita habría dejado una
columna de jaspe conocida popularmente como «el Pilar». Se cuenta que Santiago
y los siete primeros convertidos de la ciudad edificaron una primitiva capilla
de adobe a orillas del Ebro. Este testimonio es recogido por un manuscrito de
1297 de los Moralia, sive Expositio in Job, de Gregorio Magno, que se custodia
en el Archivo del Pilar. La devoción mariana comenzó en los albores del siglo
XIII, cuando comenzaron las primeras peregrinaciones a Santa María la Mayor.
Sobre la iglesia mozárabe preexistente, se erige el templo
románico del Pilar poco después de la conquista de Zaragoza por Alfonso I el
Batallador (1118) que fue culminado en el siglo XIII. En esta época se
documenta en el templo una capilla primitiva para alojar el Pilar, según
transmite Diego de Espés en 1240. Para 1293 el templo se encontraba en tan mal
estado que el obispo Hugo de Mataplana promovió la restauración del templo y su
conversión en la colegiata gótico-mudéjar de Santa María la Mayor con recursos
de una bula de Bonifacio VIII que por vez primera menciona la advocación «del
Pilar». Actualmente el único vestigio conservado del templo románico del Pilar
es el tímpano de la iglesia, que ha sido colocado en la fachada sur de la
basílica barroca.
Un buen reportaje, es posiblemente una de las mas queridas, hoy es festejada para alegría de sus vecinos. Feliz día y un abrazo
ResponderEliminarEnhorabuena, Ana. Un gran reportaje, muy completo. El día de hoy es uno de los que más tradición y festivos tenemos en el calendario.
ResponderEliminarTambién tenemos en Sevilla como Patrona a la Virgen del Pilar.
Felicidades a todas las Pilar.
Un abrazo.
Gracias por compartir. Un beso.
ResponderEliminarComparto ese ver y ese sentir en pleno
ResponderEliminarsiempre es bueno saber de esa alegría
abrazos.
Gracias Ana por esta extensa información y si no te molesta añado cuando y quien finalizó las cúpulas, en la del centro está pintado su escudo arzobispal.
ResponderEliminarFray Manuel García Gil arzobispo de Zaragoza, llamado “El Santo Gallego” llevó a cabo las obras para rematar y embellecer el grandioso templo, comenzaron el 22 de octubre de 1863, al considerar como un aviso del cielo el donativo de ochocientos mil reales hecho por un devoto de Madrid. Llovieron los donativos, se recaudaron en dos meses medio millón de reales, se subastaron las joyas de la Virgen y se tomó el acuerdo de levantar la gran cúpula central y simultáneamente se fueron montando las cuatro cúpulas pequeñas. Las obras de la terminación y ornamentación de la básica del Pilar duraron diez años. El día 10 de octubre de 1872, terminadas las obras, fue consagrado el grandioso templo, con general satisfacción.
Fray Manuel García Gil, está enterrado en la cripta del pilar.
Un gran abrazo.
Ambar