miércoles, 31 de julio de 2013

LA RISA





El buen humor, así como el mal humor, se contagian. ¿Cuál de ellos vas a escoger?
Si estás de buen humor, las personas a tu alrededor también lo estarán y eso te dará más fuerza.


Así que lo mejor que puedes hacer es reírte. Ríete de la vida, ríete de los problemas, ríete de ti mismo.
La gente comienza a ser feliz cuando es capaz de reírse de sí misma. Ríete de las cosas buenas que te suceden. Ríete abiertamente para que todos se puedan contagiar de tu alegría. Ríete porque no vale la pena estar de mal humor.

"La risa es un verdadero desintoxicante moral capaz de curar o por lo menos atenuar la mayoría de nuestros males. Y además, no hay ningún peligro si se supera la dosis". William Fry, neurólogo estadounidense.

Aunque siempre se ha sabido que el sentido del humor influye en la recuperación de los enfermos, fue a partir de la década de los 70 cuando la risoterapia consiguió el empujón definitivo con el famoso caso de Norman Cousins: un importante ejecutivo de Nueva York, conocido crítico y editor de Saturday Review, a quien a los cincuenta años le fue diagnosticada espondilitis anquilosante (artritis espinal sumamente dolorosa) que lo dejó lisiado.

Los doctores no conocían la cura para la enfermedad y ante este panorama nada alentador Cousins cayó en depresión mayor, mientras más se deprimía peor era su estado y el dolor se hacía cada vez más intenso.

Los médicos le dijeron que un poquito de alegría le vendría bien, así que pidió varias películas cómicas y apenas comenzó a verlas y a reírse a carcajadas, se sintió mejor; así descubrió que por diez minutos de risa a mandíbula batiente lograba eliminar el dolor por dos horas, mientras más se reía mejor se sentía; además gracias a sus sesiones diarias de risa pudo conciliar otra vez el sueño”.

lunes, 29 de julio de 2013

LA SIESTA



La siesta es un regalo para nuestro corazón.
Siempre hemos oído decir que la siesta era cosa de España y de los españoles, pero también está presente en Latinoamérica, China, Taiwán, Filipinas, India, Grecia, Francia, Oriente Medio y África del Norte.
Esta palabra viene de la hora sexta romana, que designa la hora solar, correspondiente a las doce del mediodía con respecto al sol.  Actualmente las catorce horas, momento en el cual se hacía una pausa de las labores cotidianas para descansar y reponer fuerzas.
Está demostrado científicamente que una siesta de veinte a treinta minutos, mejora la salud en general, la circulación sanguínea y previene el agobio, la presión o el estrés. Además favorece la memoria y los mecanismos de aprendizaje.
Un estudio hecho por la facultad de medicina de la Universidad de Atenas (Grecia), realizado a lo largo de seis años, a un total de veinticuatro mil adultos griegos, los resultados demostraron que quienes dormían regularmente una siesta al mediodía, reducían más de un tercio su riesgo de fallecer a causa de enfermedad cardiaca.
Así que, a practicar siesta, eso sí, solamente unos veinte minutos, con ese tiempo es suficiente para recargar pilas, descansar el cuerpo y la mente.

viernes, 26 de julio de 2013

SANTA ANA




La tradición cristiana dice que Ana, casada con Joaquín, fue madre de María y por tanto abuela de Jesús de Nazaret.

Santa Ana era natural de Belén. Sus padres eran Mathan y Emerenciana. Descendía del rey David.

El nombre es conocido en hebreo como Hannah. Todo lo que se conoce sobre su vida, incluso su nombre, procede de literatura apócrifa. El Evangelio de la Natividad de María, el Evangelio apócrifo de Mateo y el Protoevangelium de Santiago. En Oriente el Protoevangelium gozaba de gran autoridad, algunas porciones se leían en las fiestas de la Virgen María. En Occidente sin embargo, fue rechazado por los Padres de la Iglesia. En el siglo XIII, partes del Protoevangelium de Santiago fue incorporado por Jacobus de Vorágine en su "Leyenda Dorada". Desde entonces la historia de Santa Ana se propagó por Occidente hasta convertirse en una de las santas más populares de la Iglesia latina.

Según el Protoevangelio de Santiago, Joaquín y Ana eran una pareja acomodada, pero estéril. Joaquín fue rechazado al llevar su ofrenda al templo por no tener descendencia. Apenado, Joaquín no volvió a su casa, sino que se dirigió a una montaña, donde rogó a Dios que le diera un hijo ayunando durante 40 días y 40 noches. Ana, mientras tanto, lloraba su dolor. Entonces un ángel se les apareció simultáneamente, anunciando que sus ruegos habían sido escuchados y que concebirían un hijo.

Ana prometió dedicar al niño al servicio de Dios y cumplidos los nueve meses dio a luz a una niña a la que llamó Miriam (María). Al cumplir los tres años, Joaquín y Ana llevaron a María al templo para consagrarla a Dios como habían prometido. María vivió en el templo hasta que cumplió los 12 años, edad en la que fue entregada a José como esposa.

No se suele mostrar a Ana en el Nacimiento de Cristo pero frecuentemente se la representa con el Niño Jesús en varios temas. Ana no es representada con el Cristo adulto, así que se considera que murió durante la juventud de Jesús.

En la Iglesia del Oriente ya se veneraba a Santa Ana en el siglo IV. La mejor prueba de ello es que el emperador Justino I, en 565 le dedicó una iglesia. La devoción a Santa Ana se encuentra en los más antiguos documentos litúrgicos de la Iglesia griega. En Occidente no se venera a Santa Ana, excepto quizás en el sur de Francia, hasta el siglo XIII. Su imagen, pintada en el siglo VIII en estilo Bizantino, fue más tarde encontrada en la iglesia de Santa María Antigua en Roma. Su fiesta, bajo la influencia de la "Leyenda Dorada", aparece en el siglo XIII donde se celebraba el 26 Julio.

En 1382, Urbano VI publicó el primer decreto pontificio referente a Santa Ana, concediendo la celebración de la fiesta de la santa a los obispos de Inglaterra exclusivamente, tal como se lo habían pedido algunos ingleses. Muy probablemente la ocasión de dicho decreto fue el matrimonio del rey Ricardo II con Ana de Bohemia, que tuvo lugar en ese año. La fiesta fue extendida a toda la Iglesia de Occidente en 1584.

Santa Ana es patrona de innumerables lugares, en Bretaña (Francia) en Quebec (Canadá) en Florencia (Italia)…

miércoles, 24 de julio de 2013

GANESHA






Ganesha surgió como una deidad inconfundible y de forma claramente reconocible entre el siglo IV y V, durante el Imperio gruta, aunque heredó rasgos de los precursores védicos y de los anteriores a estos.
Su popularidad creció rápidamente y en el siglo IX d. C.  fue incluido entre las cinco principales deidades del smartismo (una religión hinduista ortodoxa brahmánica). En este período surgió una religión llamada ganapatia. Las principales escrituras dedicadas a Ganesha son el Ganapati.
Su imagen puede encontrarse en todas partes de la India y las diferentes sectas dentro del hinduismo, lo adoran de manera independiente. Su culto está ampliamente difundido y se extiende a lo largo de la India y al budismo y el yainismo.
Se le reza al comienzo de los rituales y ceremonias religiosas y se lo invoca como Patrón de las Escrituras durante la lectura de textos sagrados y las sesiones de escritura. Varios textos relatan anécdotas mitológicas asociadas a su nacimiento. 
El nombre Ganesha es una palabra compuesta en el sánscrito. El término significa, en forma más general una categoría, clase, comunidad, asociación o corporación. Algunos comentaristas interpretan el título Ganesha (Señor de los Ganas) como ‘señor de las multitudes’ o ‘señor de las categorías creadas.
Hay varias versiones del nacimiento de Ganesha. Según una de ellas, Párvati, esposa de Shivá, lo concibió como el guardia de su puerta para evitar que nadie entrara mientras ella tomaba un baño. Cuando nació Ganesha éste no dejo entrar a Shivá a su casa, éste se enfado y le cortó la cabeza. Párvati quedó sumamente afligida. Entonces Shivá, no pudiendo soportar la tristeza de su esposa, prometió sustituir la cabeza del recién nacido por la del primer ser vivo que oportunamente pasara por delante de la puerta. Y pasó un elefante.
Otra versión más popular cuenta que Shivá abandonó la casa cuando Párvati estaba embarazada. Shivá después de un tiempo volvió y tuvo una disputa con su hijo, llevándolo a la muerte sin saber que había matado a su propio vástago. Párvati a consecuencia de ese acto, quedó sumamente afligida. Entonces Shivá prometió sustituir la cabeza del recién nacido con la del primer bebe que no estuviera a los regazos de su madre. El único ser vivo que cumplía los requisitos fue el elefante, ya que éste deja a sus crías solas.
La mayoría de las representaciones del dios tienen cuatro brazos, en cada mano lleva un atributo distinto que puede variar, pero generalmente se trata de
  • Una soga, para conducir a sus devotos (como ganado) hacia el sendero espiritual.
  • Un hacha, para cortar las ataduras perecederas de los devotos.
  • Un laddu (dulce hecho con harina de garbanzo, mantequilla frita, leche condensada y frutas secas), que es su dulce preferido y que usa para recompensar a sus devotos por sus actividades espirituales.
  • Una maza de oro decorada (que representa el autocontrol).
  • Una trompa de caracol, cuyo sonido alegra a sus devotos
  • Un pedazo de colmillo roto como pluma para escribir el Majábharata que le dicta Viasa
  • Una mano extendida en el varadá mudrá (‘gesto de bendición’) para impartir gracias a sus devotos.
En su cabeza se ve un halo (que representa su condición divina).